¿Qué es la NFE? Un proyecto que, como todos los proyectos, intenta ampliar la realidad utilizando las posibilidades de la inteligencia. La idea surgió por la constatación de un hecho. El ser humano es un híbrido de naturaleza y cultura. La evolución biológica fue prolongada por la evolución cultural. Junto a la herencia genética, actúa la herencia social, transmitida por la educación, que se convierte así en el gran mecanismo evolutivo.
José A. Marina
Hasta ahora, la función de la institución educativa era transmitir aquello que una sociedad consideraba que debía conservarse. Por eso, la educación ha sido siempre conservadora y reproductora, como afirmaba Bourdieu, un notable sociólogo. Esa idea valía para sociedades estáticas y homogéneas, pero no para las nuestras, que son veloces y heterogéneas. Por eso, la educación tiene que cambiar la idea que de sí misma tiene. No puede ser mera transmisora, sino seleccionadora de contenidos, cuidadora del futuro, agente de progreso.
¿Quién puede decidir lo que conviene que aprenda un niño? ¿Cuáles son los recursos fundamentales –intelectuales, afectivos, ejecutivos, morales- que debe adquirir para poder llevar una vida libre, responsable, feliz y digna? ¿Los políticos? No es su tarea y suelen estar sometidos a prejuicios ideológicos. ¿Los científicos? Están en sus especialidades y no tienen una visión global. ¿Los sacerdotes? Sus competencias son estrictamente religiosas y sólo tienen validez para sus fieles. ¿Los padres? ¡Ojalá lo supieran y nos lo enseñaran! ¿Los filósofos? Tradicionalmente ha sido su función, pero ahora se han refugiado en un saber abstracto, histórico y poco operativo. Necesitamos recuperar un saber práctico, amplio, atento a las circunstancias, crítico, con una clara idea ética, que comprenda los mecanismos de la inteligencia humana y sus creaciones, y que sepa ayudar a los niños, a los adolescentes, a los adultos y a los ancianos a desarrollar sus capacidades. La Educación, con todos sus saberes auxiliares, en especial una filosofía responsable y comprometida, es, en este momento de la historia, la punta de lanza de la evolución.
¿Es un disparate lo que digo? Creo que no. Es sólo la gran tarea encomendada a una gran profesión. Los docentes somos la conciencia reflexiva de la sociedad en temas educativos. Los cuidadores del futuro. Cuando un maestro enseña el abecedario a los niños está transfigurando su naturaleza, les está permitiendo asimilar en pocos años lo que la humanidad tardó cientos de siglos en inventar. Debemos ser conscientes de esta noble tarea y pedir a las demás ciencias que trabajen para nosotros. Durante la edad media se decía que la filosofía debía ser ancilla theologiae, servidora de la teología. Ahora, la consigna tiene que ser otra: la filosofía debe ser servidora de la educación. Y también la física, y la biología, y las matemáticas, y la historia, y la literatura. ¿Y qué decir de la neurociencia, que tantas enseñanzas nos proporciona? Estamos embarcados en la aventura metafísica de definir nuestra evolución y, vuelvo a repetirlo, somos los que estamos en primera línea.
En este momento, esta tarea nos supera. No sabemos hacerla. Pues tendremos que aprender, si queremos cumplir con nuestra responsabilidad. Nos hemos acostumbrado a ser meros transmisores de lo que los gobiernos nos dicen. Pero la marcha de la historia exige otros objetivos. Hemos de ser conscientes de que o somos colaboracionistas o somos agentes activos. La Nueva Frontera Educativa significa ser conscientes de que el futuro es incierto y que nosotros somos sus parteros. Este blog se titula EN BUSCA DE LA NUEVA FRONTERA porque necesitamos definirla, y entrenarnos para alcanzarla.
Los docentes debemos tener presencia pública fuera de la escuela cada vez que se hable de temas educativos, porque somos nosotros los que DEBEMOS saber de ellos.
Fuente: Aprender a pensar
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en mi blog.